Las avispas y las abejas son una auténtica pesadilla cada verano ya que suelen ser las más habituales en nuestras calles. Cuando vemos una avispa o una abeja volando hacia nosotros, pueden parecernos casi iguales, pero nada eso. Más lejos de la realidad, las avispas y las abejas son insectos muy diferentes, tanto en su morfología, dieta y comportamiento. A veces intentamos hacer la diferencia entre una abeja y una avispa, y muchas de las veces es porque una relación fuerte que existe entre estos dos insectos es que nos preocupa en este momento que seamos picados o mordidos por ellos. ¿Sabes distinguir las abejas de las avispas y viceversa? Vamos a observar con atención estas diferencias porque después de leer este artículo no veremos a estos insectos o bichos de la misma manera.

5 diferencias importantes entre las avispas y las abejas

1.    El tamaño

Al ver una avispa o una abeja, pueden parecer iguales en cuanto al tamaño se refiere. Anatómicamente, las abejas son más robustas y peludas, mientras que el exoesqueleto de una avispa tiene curvas más pronunciadas y una superficie más brillante. Comparten sus tres secciones: cabeza, tórax y abdomen, pero también se diferencian en la forma de sus alas. En cuanto a sus medidas exactas, la diferencia entre avispa y abeja no es tan llamativa. Según la especie y la casta, las abejas miden entre 2 milímetros y 3,9 centímetros. En cambio, en el caso de las avispas, estas miden entre 2,5 y 3,5 cm de media.

2.    El color

Cuando se trata de insectos, el color amarillo representa agresividad en toda regla. Y es por eso que cuando empezamos a correr o a huir de cualquiera de estos insectos, parecen ser exactamente iguales en tamaño y color, pero la verdad es que hay una diferencia bastante notable entre la avispa y la abeja en estos dos rasgos. Para empezar, si hacemos referencia al color que tienen estos dos, las abejas son de color marrón con un tono casi amarillo anaranjado, mientras que las avispas son de color amarillo y negro o marrón oscuro (marrón) con rayas de color amarillo brillante. Así que, es comprendible que de lejos no consigas diferenciar a una de la otra, pero sí que son diferentes en color.

3.    La alimentación

Existen muchas razones para decir que sí que existen diferencia entre la avispa y la abeja. Para conocer un poco más la diferencia entre una abeja y una avispa, es importante observar su comportamiento e incluso su alimentación o su dieta. Las abejas se alimentan principalmente del polen de flores y plantas, mientras que las avispas son depredadores voraces porque se alimentan de otros insectos, de ahí que se diga que una plaga de avispas puede llegar a destruir otras plagas de insectos e incluso cultivos en sí. ¡Esa es la manera en que está! Las abejas tienen poderosas mandíbulas para devorar otros insectos, frutas, néctar de flores e incluso abejas.

4.    Las funciones en el ecosistema de nuestro planeta

La función de la abeja es polinizar las plantas, es decir, se encargan de transportar el polen que favorece el proceso de fecundación para la formación de diferentes tipos de frutos y semillas. En definitiva, tienen una función vital para la vida en nuestro planeta. En cambio, la avispa, es de naturaleza depredadora, un controlador biológico de plagas. Este suele atacar a otros insectos para comer o poner sus huevos.

5.    La mordida o mordedura

En cuanto a su picadura, la avispa puede picar varias veces y eso se debe a que su picadura es suave. Puede entrar y salir fácilmente de la superficie de penetración. La picadura de abeja, a su vez, es como una pequeña “sierra” que no se puede quitar tras la picadura y queda clavada en la piel. Al picar, las abejas mueren porque, además de su aguijón, también forman parte de su sistema digestivo algunos nervios y músculos importantes. En las avispas, la picadura se produce únicamente en las hembras, ya que tiene una función reproductiva. A través del aguijón, las avispas fértiles ponen los huevos de las futuras larvas, y no siempre es cierto que el conducto sirva para inyectar veneno en sus presas. Las avispas pueden picar a sus presas una y otra vez. En las abejas, la picadura cumple una función defensiva y, por tanto, siempre se asocia a la inoculación de veneno. En general, las abejas son insectos pacíficos que solo atacan cuando se sienten amenazados, de forma individual o colectiva, mientras que las avispas suelen ser insectos agresivos. El dolor de la picadura de una avispa es especialmente molesto y probablemente por ello es uno de los insectos menos apreciados. Es importante no molestarlas ya que las avispas pueden picar repetidamente, a diferencia de las abejas que mueren cuando pican.

Estas son algunas de las diferencias entre las avispas y las abejas, así que cuando veas un insecto con características similares descritas en este artículo, ya podrás más o menos diferenciar qué es exactamente.

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