La madera de coníferas en general tiene un mayor contenido de lignina (27-35%) que la madera de angiospermas dicotiledóneas o “maderas duras” (19-24%).
Los hongos de pudrición blanca tienen un sistema de enzimas celulasa y lignasa que le permiten degradar todos los componentes de las paredes celulares de la madera. Algunos, sin embargo, remueven lignina mas rápido.
La mayoría de ellos aparentemente remueve la lignina y polisacaridos casi al mismo tiempo, y la madera en estado intermedio o avanzado de pudrición contiene casi iguales proporciones de estos componentes que en la madera sana.
La madera podrida por hongos de pudrición blanca tiende a perder gradualmente su propiedades de solidez y retiene su estructura fibrosa aún en estados avanzados. La madera podrida se vuelve esponjosa, filamentosa, o laminada y usualmente está manchada y descolorida en relación a la madera sana.
Los hongos de pudrición castaña remueven selectivamente celulosa y hemicelulosa de la madera. La madera podrida por hongos de pudrición castaña pierde rápidamente sus propiedades de solidez y experimentan roturas drásticas. En estados avanzados la madera es reducida a un residuo de trozos amorfos, blandos, castaños, cúbicos, compuestos mayormente de lignina ligeramente modificada.